Preparaos los que buscáis fotógrafo de Comunión o un bonito vestido porque la entrada de hoy viene cargadita de fotos de Comunión de lo más especiales. Los que me seguís por Facebook ya sabéis que este año he tenido el enorme placer de hacer el catálogo de Comunión de la firma Alejitos. Cuando su diseñadora, Sagrario Ramírez, me llamó porque estaba interesada en que yo hiciera las fotos salté de alegría. Para un fotógrafo de Comunión no puede haber nada más goloso. Me encanta pensar en la sesión, en el atrezo, en la luz que quiero para la sesión... La verdad es que me pasé días y días dándole vueltas a cómo hacerlo. Sagrario dejó en mis manos toda la parte creativa, lo cual es un lujo.
Esta firma, ALEJITOS, cuida al detalle sus colecciones, con coronas de flores a juego, fajines y hasta zapatos. Además, sus tejidos tan ricos (linos, organzas, batistas, voiles, seda salvaje, chiffon...) y esos encajes exquisitos de tul, chantillie, valencien... caracterizan a la firma y le dan un toque romántico y delicado. Así que lo primero que me vino a la mente para elegir localización fue: flores y más flores.
Después pensé que, aunque quizá vería perfectamente estos vestidos en ambiente palaciego o en otra época, había que bajarlos a un nivel más sencillo. Pero, la verdad, me cansan ya un poco esas fotos de fondo blanco y poco más... Me imaginé un antiguo desván lleno de cachivaches, una especie de vivero abandonado en el que todavía florecen las peonías...
¡Ya lo tenía! La floristería Verde Pimienta accedió gustosa a prestarme todas las flores y el atrezo. Ya he colaborado con ellos en alguna ocasión y, además de ser la floristería más maravillosa de todo Madrid, encima son buena gente y da gusto trabajar con ellos.
Ya teníamos vestidos, localización, atrezo... Nos faltaban las modelos. Desde distintos puntos de España vinieron para la ocasión Marisol, Sara, Valeria y Ulizana. Maravillosas las cuatro. A cada cual más bonita y superprofesionales con lo chiquitinas que son. ¡Un 10!
Como pequeñas cuidadoras de esa casa abandonada o de ese jardín imaginario, mi ojo no podía dejar de ver lo maravilloso que era todo, con esos fondos verde provenza, las cestas, las velas... Y se me pasaron las horas sin darme cuenta. Os dejo muchísimas fotos pero en mis archivos hay muchísimas más, de verdad que no podía parar.
Cada niña dotaba de personalidad a cada vestido, al igual que cuando compráis el de vuestras hijas tiene que adecuarse a ellas. De hecho, en el atelier de Alejitos, Sagrario recomienda y hace a medida cada vestido, con patrón propio y atención personalizada. Una maravilla.
Cada vestido cuenta una historia y algunos parecen sacados de otra época, ¿verdad? Apetece combinar con un carrito antiguo, con un canotier o con una vieja maleta...
Lo bueno de hacer un vestido a medida es que puedes elegir cómo o dónde quieres las terminaciones. A mí personalmente este de plumeti me enamoró...
Bueno, ya lo veis, disfruté como una enana en esta sesión. Mi imaginación volaba con cada foto...
Además me consta que no fui la única: las niñas tuvieron tiempo hasta de jugar y hacerse amigas.
Espero que estas fotos de Comunión te hayan gustado tanto como a mí. Y si tu hija/o hace la Comunión este año y buscas fotógrafo te aconsejo que reserves tu sesión cuanto antes porque al ser todas las comuniones en la misma fecha nos quedamos sin hueco muy prontito. Ya sabéis que hacemos tanto las sesiones previas o posteriores a la Comunión (en estudio o exteriores), como el reportaje el mismo día de la ceremonia y celebración familiar.
Puedes contactar conmigo en el email: info@ruthzabalza.com o en el teléfono: 617 12 26 58.
Y en la web de Alejitos tenéis todos los datos de contacto para pedir vuestra cita previa.
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