¿Os habéis fijado alguna vez en que en los momentos más importantes de nuestra vida siempre hay flores? Cuando nacemos, cuando nos casamos, cuando nos conquistan, cuando nos felicitan por algo importante, cuando nos quieren pedir perdón, cuando nacen nuestros hijos... y hasta cuando morimos. ¿A quién no le gustan? Pero hay quien de la pasión hace una profesión. Es el caso de Clara
Fernández Shaw, que a pesar de ser farmaceútica, no puede vivir sin
ellas y dedica todo su tiempo libre a confeccionar preciosos ramos,
centros, decoraciones para eventos...
El destino me hizo conocerla y ella me
pidió que fotografiara sus trabajos para renovar su web, EL COLOR DE LA GERBERA, que efectivamente necesita un lavado de cara porque en la actual no lucen como deberían sus composiciones florales.
Y para mí es un placer poder fotografíar este arte vivo.
¡Espero haberos alegrado el día con estas flores tan maravillosas!
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